Satine

Nacio en un tiempo de guerra. Mis padres, grandes guerreros conocidos por su destreza en combate, decidieron abandonarme en el bosque para protegerme del conflicto que asolaba nuestras tierras. Un grupo de gnomos me encontraron y, conmovidos por mi vulnerabilidad, me acogieron como una de los suyos.

Me dieron el nombre de Satine, inspirado en una antigua leyenda sobre una estrella que guiaba a los perdidos. Creciendo entre los gnomos, Satine fue enseñada a respetar y cuidar la naturaleza. Sus días estaban llenos de aprendizaje sobre las plantas, los animales y los misterios del bosque. Los gnomos, sabiendo que dentro de ella residía un gran poder, le otorgaron una gema mágica que la ayudaría a controlar sus habilidades y evitar que se desbordaran.

A pesar de llevar en sus genes la capacidad de ser una excelente guerrera, Satine no es consciente de esto. Los gnomos, que valoran la paz y la armonía, le enseñaron desde pequeña a no dañar a ningún ser viviente. Por lo que, Satine siente un profundo temor a usar sus poderes o habilidades en combate. Prefiere evitar la confrontación y busca siempre soluciones pacíficas a los problemas que enfrenta.

Satine es una joven muy positiva, llena de energía y entusiasmo por la vida. Sin embargo, su naturaleza ansiosa y sus temores constantes la hacen dudar de sí misma en situaciones peligrosas. A pesar de esto, su espíritu indomable y su amor por la naturaleza la impulsan a seguir adelante.

Entre los gnomos, Satine encontró un amigo especial: un bardo que veía más allá de sus miedos y reconocía su potencial. Este bardo se convirtió en su confidente y mentor, enseñándole el arte del canto. Descubrió que sus canciones no solo traían alegría, sino que también poseían un poder sanador. Cuando Satine canta, sus melodías pueden curar heridas y calmar corazones afligidos.

Pero el poder de Satine era desbordante por lo que los gnomos le obsequiaron una gema, es un símbolo de su confianza en ella que le ayuda a controlar su poder. Aunque todavía teme usar sus poderes plenamente, Satine lleva la gema como un recordatorio de su misión de proteger y sanar la naturaleza. Satine está destinada a descubrir la verdad sobre sus orígenes y a reconciliar su pacífica crianza con el legado de guerrera que corre por sus venas.

Gracias a sus nuevos compañeros en la Guardia Escarlata Satine se prepara para enfrentar su destino, encontrar su verdadera fuerza y convertirse en la guardiana que su mundo necesita.